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Las rodillas opacas y doloridas son una queja común desde los entusiastas del deporte hasta las madres jóvenes y las personas mayores. Cuando el dolor de rodilla ataca, muchas personas se apresuran a buscar una causa y una cura, pero a menudo buscan en el lugar equivocado.

La gente asume automáticamente que cuando sus rodillas duelen, la causa del problema debe estar dentro de su rodilla, pero a menudo no es el caso. Hay muchas causas diferentes de dolor de rodilla, y una de las más comunes es la que la gente menos espera: sus pies.

Cuando veo a un paciente por primera vez, yo, como todos los pedortistas, hago un examen completo de las extremidades inferiores, incluyendo una evaluación de la marcha porque la forma en que una persona camina tiene un gran impacto en la salud de sus rodillas. Si los pies ruedan demasiado hacia dentro o se inclinan hacia fuera, la parte inferior de la pierna se moverá de tal manera que ejercerá una presión adicional sobre la rodilla cada vez que dé un paso. Si el tobillo no tiene la amplitud de movimiento que debería, también puede afectar a las rodillas. La diferencia en la longitud de las piernas, un problema común que afecta a muchos canadienses, también puede provocar dolor de rodilla, ya que la discrepancia puede crear tensión en las articulaciones de la rodilla.

Además de los problemas biomecánicos, los zapatos mal ajustados y sin apoyo son otra causa común de dolor de rodilla, sobre todo si se usan repetidamente o para actividades extenuantes. Siempre examino detenidamente los zapatos de los pacientes y les aconsejo qué características deben buscar en su calzado. Les explico lo importante que es que lleven un calzado bien ajustado, apropiado para la actividad y en buenas condiciones para todos los deportes, y que los zapatos endebles y de moda sólo deben usarse en ocasiones, y definitivamente cuando no se planea caminar o estar de pie durante mucho tiempo. El calzado de un paciente dice mucho de su estado actual y de las afecciones que puede desarrollar si no cambia su calzado.

El dolor detrás, debajo o a los lados de la rótula es doloroso, frustrante y muy común. Pero algunos tipos de dolor de rodilla son fáciles de tratar y se pueden prevenir, sobre todo cuando provienen de los pies. Si padece dolor de rodilla, pida cita con su médico de cabecera y pregunte si puede remitirle a un pedortista certificado canadiense. Puede que se sorprenda gratamente al descubrir que una órtesis para el pie o un cambio de calzado es todo lo que necesita para recuperar la movilidad y reducir el dolor.

Por Alison Smith, C. Ped Tech (C), C. Ped (C), Moncton, NB

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