Construir un casino en Kapolei es la última idea del Departamento de Tierras de Hawai para conseguir más ingresos para la agencia que carece de efectivo.
En una reunión que comienza el lunes, la Comisión de Casas de Hawai está programada para considerar una propuesta legislativa que permitiría el juego en Hawai, pero sólo para el propósito limitado de los juegos de casino y sólo en la tierra DHHL en Kapolei.
La propuesta se presenta ahora «para hacer frente a los históricos déficits de financiación del Departamento, agravados por el cierre económico de la pandemia mundial», dice Lehua Kinilau-Cano, analista legislativo de DHHL, en el resumen del proyecto de ley.
El Honolulu Star-Advertiser informó por primera vez sobre el nuevo punto de la agenda el miércoles.
De acuerdo con la propuesta, DHHL obtendría los pagos de impuestos realizados sobre los ingresos del juego.
El proyecto de ley legalizaría el juego en Hawai, al menos en lo que se refiere a los casinos. También crearía una Comisión del Juego de Hawái, que tendría autoridad para aprobar y revocar las licencias de juego, así como para investigar a las empresas de juego.
Las licencias estarían restringidas a los terrenos de DHHL que se han reservado para uso comercial en Kapolei.
El punto del orden del día para la propuesta legislativa está etiquetado como «Sólo para información», por lo que no está claro que la comisión tome alguna medida sobre el proyecto de ley durante la reunión de la próxima semana.
Kinilau-Cano señala en un resumen del proyecto de ley que la propuesta todavía está bajo revisión para su inclusión en el paquete administrativo de proyectos de ley del gobernador David Ige para la próxima sesión legislativa programada para comenzar el 20 de enero. El departamento todavía puede retirar la medida.
Al igual que cualquier propuesta de cambio en la ley, el proyecto de ley de casinos tendría que ganar la aprobación en la Legislatura, que ahora mismo parece poco probable.
El presidente del Senado, Ron Kouchi, dijo el lunes que no sería partidario de permitir el juego en cualquier forma.
Le preocupa que si se legaliza el juego en Hawái podría abrir la puerta a las tribus de nativos americanos para establecer casinos en Hawái, lo que dejaría al estado y a los hawaianos sin ingresos por ese tipo de operaciones.
«Verían grandes ingresos por las operaciones de juego», dijo Kouchi. «Y los nativos hawaianos se quedarían fuera».
Los juegos de azar tribales, sin embargo, están fuertemente regulados por el Departamento del Interior de Estados Unidos, que exige a los estados la firma de pactos con las tribus y diversas aprobaciones federales.
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