Estos tamales están entre los más populares de México, particularmente en el centro del país. También son uno de los tamales más conocidos en Estados Unidos, junto con los Tamales de Puerco. La palabra tamal viene del náhuatl tamalli, que significa «envuelto». Los tamales se cuecen al vapor en una envoltura de hoja, generalmente una hoja de maíz o una hoja de plátano, pero otras envolturas incluyen hojas de aguacate, hoja santa y otras hojas no tóxicas que se encuentran en México.
NOTAS
– En lugar de la manteca de cerdo, se puede utilizar manteca o incluso aceite vegetal.
– Para batir la masa, suelo utilizar una batidora de mano, pero uso una batidora de pie cuando hago un lote grande de masa.
– Al montar los tamales, los cocineros no miden realmente las cantidades específicas de masa y relleno que se añaden a cada cáscara. En su lugar, echan las cantidades que consideran apropiadas, tratando de mantenerse dentro de un rango consistente. Las cantidades utilizadas pueden depender de la superficie que tenga la hoja de maíz (pueden variar de tamaño), así como del tamaño que el cocinero quiera que tengan los tamales.
– Se pueden atar los tamales con una tira de hoja de maíz. No es necesario, pero ayuda a mantenerlos intactos durante el proceso de cocción (esto es especialmente cierto cuando se hacen tamales más grandes). Algunas personas utilizan la tira como indicador cuando hacen diferentes tipos de tamales, atando sólo uno de ellos para que sea fácil saber cuál es sin tener que abrirlos.
– Si necesita añadir más agua a la olla al cocer los tamales al vapor, asegúrese de verterla lo más cerca posible de la pared de la olla, evitando los tamales. Si el agua entra en los tamales, éstos perderán su sabor y la masa quedará empapada.
– Un truco que utilizan los cocineros mexicanos es colocar una moneda en el fondo de la olla, debajo de la rejilla de cocción al vapor. Si el agua se evapora, la moneda empezará a sonar, indicando que hay que añadir más agua a la olla.
– Los tamales se pueden congelar en bolsas de plástico hasta 4 meses. Puede recalentar los tamales congelados en el microondas durante 2 minutos por tamal si están congelados y 1 minuto si están descongelados, volver a cocer al vapor los tamales descongelados durante 15 minutos, o colocar los tamales descongelados, con las hojas de maíz todavía puestas, en una sartén a fuego medio-alto durante 10 minutos. Las hojas de maíz comenzarán a tostarse, lo que añadirá un sabor ahumado adicional a los tamales. Voltéelos 2 ó 3 veces hasta que estén calientes.