Sacrificio humanitario: cómo reducimos el sufrimiento de los animales

Desde 2007, nuestro trabajo para promover el sacrificio humanitario en Brasil y China ha ayudado a más de ocho mil millones de animales

Apoyo al sacrificio humanitario

Millones de animales de granja se enfrentan a un estrés y sufrimiento innecesarios antes y durante el sacrificio, porque los trabajadores carecen de la experiencia, las habilidades y la tecnología para garantizar un trato humanitario. Por eso trabajamos con empresas alimentarias, gobiernos y científicos de Brasil, China e Indonesia para fomentar el sacrificio humanitario. Y nuestro trabajo con los socios está ayudando a los veterinarios de Indonesia, Camboya y Filipinas a introducir también el sacrificio humanitario.

Para reducir el sufrimiento de los animales, ofrecimos consejos prácticos y directos y formación para ayudar a empresas y gobiernos a tomar medidas

Sacrificio humanitario: nuestra solución

Los cambios realizados en los mataderos tras nuestra formación incluyeron:

  • Uso de técnicas de manejo humanitario
  • Aturdimiento previo al sacrificio, que impide que los animales sientan dolor
  • Uso correcto del equipo de aturdimiento y sujeción
  • Manejo de los cerdos en grupos para reducir el estrés de los animales individuales
  • Instalación de lámparas azules para calmar a las aves de corral
  • Uso de suelos antideslizantes y rampas de bajo ángulo para evitar que los animales se caigan y se lesionen

Para asegurarnos de que el cambio sea duradero, nosotros:

  • Ayudamos a las empresas a introducir políticas y directrices sobre el sacrificio humanitario
  • Pedimos legislación y códigos de prácticas sobre el sacrificio humanitario
  • Trabajamos con las escuelas de veterinaria para introducir la enseñanza sobre el sacrificio humanitario

Lo más importante, el sacrificio humanitario es mejor para los animales, pero también tiene beneficios económicos

Beneficios para las empresas

Un estudio de cinco años sobre nuestra formación en sacrificio humanitario descubrió que los mataderos ganaban una mejor reputación al utilizar métodos humanitarios, lo que les ayudaba a competir a nivel mundial. También mejoró la moral del personal. Además, al haber menos animales heridos, se produjeron menos magulladuras en las canales, lo que mejoró la calidad de la carne. En una planta de sacrificio de Brasil, se magulló un 63% menos de animales tras nuestra formación.

Descubra más sobre nuestro trabajo para apoyar a 70.000 millones de animales en la ganadería.

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