Los tendones ayudan a unir los músculos a los huesos. El músculo bíceps tiene dos tendones, uno de los cuales lo une al hueso en el hombro y el otro se une en el codo. El bíceps ayuda a doblar el codo, al movimiento de rotación del antebrazo y ayuda a estabilizar la articulación del hombro.
Si se produce un desgarro en el tendón del bíceps del hombro, experimentará dolor en la zona del hombro, pero la mayoría de las personas pueden seguir funcionando y sólo necesitan tratamientos sencillos para aliviar los síntomas.
Sin embargo, la cirugía para reparar el tendón desgarrado puede ser necesaria si los síntomas no se pueden aliviar con tratamientos no quirúrgicos. Una vez que el tendón del bíceps se desgarra, no puede volver a crecer hasta el hueso y curarse por sí mismo.
Los desgarros del tendón del bíceps pueden ser un desgarro parcial o un desgarro completo. Un desgarro parcial es cuando el tendón no se ha seccionado completamente. Un desgarro completo incluye la división del tendón en dos secciones completas. En la mayoría de los casos, un tendón dañado comienza a deshilacharse lentamente y, a medida que la lesión empeora, el tendón puede desgarrarse por completo cuando se le somete a un esfuerzo, como levantar un objeto pesado. Las dos causas más comunes de los desgarros del tendón del bíceps son las lesiones y el uso excesivo.
Síntomas
Algunos de los síntomas de un tendón del hombro o del bíceps dañado incluyen dolor en la parte superior del brazo, un sonido de chasquido audible, hematomas, sensibilidad o una protuberancia en la zona superior del brazo por encima del codo.
Tratamiento no quirúrgico
La mayoría de las personas pueden recuperarse sin cirugía de una rotura del tendón del hombro o del bíceps. El dolor de un desgarro del tendón del bíceps puede resolverse por sí mismo con el tiempo y la debilidad menor del brazo puede no molestar nunca al paciente. Algunas de las terapias recomendadas para ayudar a curar el desgarro del tendón del hombro o del bíceps incluyen reposo, hielo, medicamentos antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno e incluso ejercicios frecuentes de fisioterapia para ayudar a aumentar la flexibilidad, fortalecer el hombro y ayudar a restaurar el movimiento.
Tratamiento quirúrgico
El tratamiento quirúrgico para un desgarro del tendón del bíceps rara vez es necesario. Para los pacientes que siguen experimentando dolor y debilidad excesiva en el brazo, la cirugía puede ser la única opción. La cirugía puede ser la mejor opción para las personas que necesitan que su brazo se mantenga bajo tensión diaria, como los atletas. La cirugía también puede ser la mejor opción para los pacientes con desgarros parciales cuyos síntomas no mejoran con el tratamiento no quirúrgico.
Existen procedimientos quirúrgicos mínimamente invasivos que ofrecen la opción de reparar el tendón con incisiones mínimas. El cirujano utilizará una cámara artroscópica y herramientas para volver a anclar el tendón desgarrado al hueso. Una cirugía exitosa puede devolver la fuerza y la función del brazo a la normalidad.
Hay varios procedimientos para lograr la reinserción del tendón del bíceps en el hueso del antebrazo. Algunas técnicas requieren que el tendón se vuelva a unir mediante puntos de sutura pasados a través de orificios perforados en el hueso, y otras veces se puede utilizar un pequeño implante metálico para volver a unir el tendón.
Una reparación del tendón del bíceps requiere que el cirujano realice una pequeña incisión en la parte superior del antebrazo. El tendón del bíceps desgarrado se sube a través de la incisión. Se insertan en el hueso dos anclajes de sutura para el tendón. Las suturas de los anclajes de sutura se pasan a través del tendón de forma entrelazada para garantizar una reparación fuerte del tendón.
Una vez finalizada la reparación, se utilizará un cabestrillo / ortesis de codo para mantener el codo doblado a 90 grados. La férula se retirará al cabo de 4-6 semanas y pueden pasar entre 6 y 12 meses hasta que se recupere toda la fuerza.
Es importante mantener el hombro inmovilizado después de la cirugía, y comenzar lentamente los ejercicios terapéuticos y de rehabilitación para recuperar la fuerza en la zona del hombro. Aunque se trata de una recuperación lenta, la fisioterapia es vital para que el paciente desarrolle de nuevo la fuerza original en el hombro / codo y vuelva a realizar actividades extenuantes.