Un concepto clave para el éxito del trasplante es cuándo una planta se ha «endurecido». Las plantas que crecen en el exterior se aclimatan de forma natural a los cambios de clima. Estas plantas se han endurecido para el invierno, pero las plantas cultivadas en un invernadero con control ambiental deben prepararse antes de ser trasplantadas.
El endurecimiento es importante porque reduce el estrés de la planta. A veces, las plantas recién trasplantadas pueden tardar varias semanas en despegar y empezar a crecer. Parte de este retraso es natural, ya que la planta generalmente pondrá energía en el establecimiento de un sistema de raíces más grande para apoyar la planta antes de trabajar en el crecimiento del follaje. Sin embargo, este retraso aumentará si la planta está estresada. El estrés puede tener impactos duraderos en una planta.
Q. ¿Qué significa el término «endurecimiento»?
A. El endurecimiento es un término utilizado para referirse a los procesos necesarios para que una planta se aclimate a su entorno. En primavera, es una práctica común acostumbrar gradualmente a los plantones de hortalizas de invernadero a la luz solar plena y a los vientos secos antes de plantarlos.
En otoño, los árboles comienzan a endurecerse o a aclimatarse a las duras condiciones invernales que comienzan con temperaturas más bajas y días más cortos. Los árboles y arbustos de hoja caduca se desprenden de las hojas y transfieren la savia a las raíces. Estos tipos de plantas desarrollan un soluto «anticongelante» que protege a las células del tejido de la planta de la congelación durante la inactividad invernal.
La aclimatación de las plantas de hoja perenne es similar. Se producen solutos para protegerse de la congelación, pero las plantas de hoja perenne no entran en letargo. Siguen produciendo «alimento» mediante la fotosíntesis durante todo el invierno. En los meses de invierno, los árboles de hoja perenne siguen tomando agua a través de las raíces y la expulsan a través de las hojas. Esto se llama transpiración.
No podemos cambiar el clima, pero hay algunas cosas que se pueden hacer para ayudar a las plantas del paisaje a sobrevivir a las condiciones invernales.
– Los suelos secos o congelados hacen que el agua no esté disponible para las raíces de las plantas de hoja perenne. La solución es regar las plantas perennes a finales del otoño. Utilice aerosoles antidesecantes y cortavientos para protegerlas.
– La nieve y el hielo intensos rompen las ramas. La solución es envolver o atar las plantas vulnerables. Aprenda las técnicas de poda adecuadas.
– Los vientos invernales y el sol directo provocan la congelación y descongelación justo debajo de la corteza. La solución es utilizar envolturas para proteger la corteza fina de los árboles.