Primeros auxilios: Lesiones en los dientes

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Si su hijo pierde un diente de leche antes de lo esperado, no es necesario intentar reemplazarlo. Pero si se le sale un diente permanente, es una emergencia dental. Los dientes permanentes tienen más posibilidades de salvarse si se sustituyen en un plazo de 15 minutos. Así que es importante actuar con rapidez y seguir las pautas que se indican a continuación.

Muchas otras lesiones dentales son menos urgentes, pero pueden necesitar ser examinadas por un dentista. La mayoría de las lesiones dentales en niños de edad preescolar y escolar se producen por caídas, mientras que las lesiones dentales en adolescentes suelen estar relacionadas con el deporte. Si cree que su hijo tiene signos de lesiones en la cabeza o de otro tipo, llame a su médico.

Qué hacer

Si un bebé, un niño pequeño o un niño de corta edad se lesiona las encías o los dientes de leche:

  1. Aplique presión en la zona (si sangra) con un trozo de gasa fría y húmeda. Si su hijo tiene edad suficiente para seguir las instrucciones, pídale que muerda la gasa.
  2. Ofrézcale una paleta de hielo para que la chupe y reduzca la hinchazón, o sostenga una bolsa de hielo envuelta en un paño en la mejilla.
  3. Déle acetaminofén o ibuprofeno según sea necesario para el dolor.
  4. Llame a un dentista.
  5. Esté atento a la inflamación de las encías, al dolor continuo, a la fiebre o al cambio de color del diente.

Si un diente permanente está astillado o roto:

  1. Recoger todos los trozos del diente.
  2. Enjuagar la boca con agua tibia.
  3. Llame inmediatamente a un dentista para programar una visita.

Obtenga atención médica si se le cae un diente permanente:

Acuda al dentista o al servicio de urgencias después de seguir estos pasos:

  1. Encuentre el diente. Llame inmediatamente a un dentista o acuda a un servicio de urgencias si no está seguro de que se trata de un diente permanente (los dientes de leche tienen los bordes lisos).
  2. Sujete el diente por la corona (el extremo «masticable» del diente), no por la raíz.
  3. Coloque el diente en una solución salina equilibrada (como Save-A-Tooth), si dispone de ella. Si no, coloque el diente en una solución salina o en un recipiente con leche o saliva de su hijo. También puedes colocar el diente entre el labio inferior y la encía. No lo guarde en agua del grifo.
  4. Para los niños mayores y los adolescentes, intente colocar el diente de nuevo en el hueco sin tocar la raíz. Haga que su hijo muerda una gasa para ayudar a mantenerlo en su sitio.
  5. Si el diente está guardado en un recipiente (en lugar de volver a colocarlo en el alvéolo), haga que su hijo muerda una gasa o un pañuelo para aliviar el sangrado y el dolor.

¡Piense en la prevención!

Asegúrese de que los niños lleven protectores bucales y equipos de protección para los deportes de contacto y cascos cuando monten en bicicleta, monopatín y patines en línea. Proteja su casa de las caídas.

Revisado por: Kate M. Cronan, MD
Fecha de revisión: Julio de 2018

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