La felicidad y la alta productividad van de la mano. Piense en los empleados felices en su lugar de trabajo actual o pasado. ¿Son más motivados, enérgicos, amables y comprometidos? Lo más probable es que sí. Y todas esas cualidades los hacen más eficaces en su trabajo.
Los empleados felices manejan mejor los desafíos y contribuyen más a sus organizaciones. Un estudio realizado por la Universidad de Warwick reveló que la felicidad hace que los empleados sean un 12% más productivos. Por lo tanto, crear un ambiente de trabajo que promueva la felicidad en todos los empleados también impulsará sus resultados.
¿Por qué la felicidad = alta productividad
La felicidad aumenta el nivel de satisfacción de los empleados en sus trabajos, e incluso sus capacidades, de múltiples maneras. Veamos las cinco razones principales por las que los empleados felices son más productivos.
Mayores niveles de compromiso
Los empleados felices están más comprometidos con su trabajo. A su vez, sus altos niveles de compromiso significan que aportan más energía, pasión e innovación a sus trabajos. Actualmente, sólo un tercio de los empleados estadounidenses dicen estar comprometidos con su trabajo, lo que significa que la mayoría de las empresas tienen mucho espacio para mejorar en esa área. Los empleados altamente comprometidos se apropian más de su propio crecimiento porque tienen pasión por sobresalir en lo que hacen.
Aumento de las tasas de retención
Debido a que las tasas de retención aumentan drásticamente para los empleados felices, esos trabajadores suelen conocer muy bien su trabajo. Es probable que permanezcan en su empresa durante años, lo que les da la oportunidad de aumentar gradualmente sus responsabilidades y aprender las formas más eficaces de realizar su trabajo. Pueden formar y entrenar a otros que están aprendiendo, lo que maximiza su valor para la empresa.
Mejor salud
Los empleados más felices tienden a sentirse mejor física y mentalmente, lo que significa que siempre traen su mejor juego y toman menos días de enfermedad. Tienen más claridad mental y energía, lo que les permite trabajar de forma más eficiente y generar soluciones creativas a los problemas.
Habilidades interpersonales más fuertes
Los empleados felices también proporcionan un mejor servicio al cliente, y son más agradables para interactuar con los clientes, compañeros de trabajo y supervisores por igual. Estas habilidades interpersonales los convierten en jugadores de equipo más eficaces que escuchan y se comunican bien con los demás. Los empleados con una perspectiva optimista son más propensos a aceptar los comentarios, ya que se sienten seguros de que pueden utilizar la crítica constructiva para mejorar.
Propensión a aprovechar el día
Dado que los empleados más felices creen en sí mismos y se sienten apoyados, tienden a aprovechar las nuevas oportunidades. Su visión optimista les lleva a detectar esas oportunidades en lugar de dejarlas pasar desapercibidas, y su confianza en sí mismos les lleva a correr riesgos. Esta confianza en sí mismos les empuja a alcanzar nuevas cotas en su carrera, lo que a su vez aumenta su satisfacción en el trabajo y su felicidad general.
Juntos, todos estos factores fomentan una cultura empresarial más armoniosa y llena de energía. Cuanto más felices sean sus empleados, más fuerte será la cultura de su empresa.
Cómo crear un lugar de trabajo más feliz
Para sentirse realmente satisfechos con su trabajo y felices en él, los empleados necesitan sentir que su empresa apoya plenamente su crecimiento y que su carrera está floreciendo. Estos son los ingredientes clave para desarrollar el impulso y el compromiso que hace que la gente sea feliz en el trabajo:
- Conecte a cada uno de sus empleados con un mentor de carrera para darles el apoyo personalizado que necesitan. Según una encuesta realizada por CNBC y Survey Monkey, nueve de cada diez empleados con un mentor profesional se sienten satisfechos con su trabajo.
- Anime a los empleados a desconectar durante la hora de la comida y otros descansos para recargarse por completo. Pasar tiempo lejos del correo electrónico y de sus teléfonos les ayudará a sacar el máximo provecho de los descansos. Hablar con los amigos durante el almuerzo o dar un paseo sin tecnología hará que todos se sientan más renovados.
- Ofrece a los empleados retos que les empujen a alcanzar el siguiente nivel. Los retos evitan que la gente se aburra con su trabajo, lo que les impulsa a seguir aprendiendo.
- Reconozca el trabajo duro de los empleados, lo que puede aumentar la felicidad, el compromiso y la productividad en un 14%.
- Fomente la amistad entre compañeros de trabajo. Las amistades cercanas en el trabajo pueden aumentar la felicidad en un 50%.
Acciones a tomar ahora:
Aquí tienes algunas ideas que puedes empezar a poner en práctica hoy mismo para crear un lugar de trabajo más feliz:
- Presenta un minitaller semanal sobre un aspecto de la conciliación de la vida laboral y familiar. Dedique unos minutos al principio de cada semana a compartir un consejo para aumentar la energía recargando eficazmente o gestionando bien el tiempo.
- Pregunte a cada empleado si se siente suficientemente desafiado por sus proyectos actuales. Si no lo hacen, delegue en ellos un mayor nivel de responsabilidad (junto con el apoyo adecuado).
- Implantee un programa de tutoría inversa, en el que los empleados más nuevos y los más veteranos compartan valiosos consejos entre sí. De este modo, los empleados con experiencia servirán de mentores profesionales a los más nuevos y obtendrán algo a cambio (como experiencia en redes sociales).
- Elogie específicamente un trabajo bien hecho. Anime a los directivos a elogiar en tiempo real cada día los logros más pequeños y a dar reconocimiento público a los logros más importantes.
- Planifique una actividad de voluntariado en grupo para animar a todo el mundo a profundizar en su amistad con los compañeros de trabajo.
Desarrollar una cultura de confianza impulsará la felicidad al animar a la gente a hablar de sus necesidades. Tomar todas estas medidas también hará que los empleados se sientan más valorados, lo que a su vez promoverá la satisfacción laboral y la felicidad. Creará un bucle de retroalimentación positiva que seguirá aumentando la felicidad -y la productividad- en toda su organización.