Resumen
Los pólipos nasales son crecimientos no cancerosos de los tejidos que recubren la nariz y los senos paranasales. Estos crecimientos suelen tener forma de lágrima y se forman en grupos.
Síntomas
Los síntomas comunes incluyen:
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Dificultad para respirar por la nariz
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Disminución del sentido del olfato
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Disminución del sentido del gusto
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Goteo postnasal
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Reconocimiento de la nariz
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Dolor de cabeza
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Tos
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Dolor facial o en los dientes superiores
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Presión alrededor de los senos paranasales
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Picor alrededor de los ojos
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Ronquidos
Causas
El desarrollo de pólipos nasales está asociado a la rinosinusitis crónica, que es la inflamación de las fosas nasales y los senos paranasales que dura 12 semanas o más. La causa de los pólipos nasales no se conoce del todo debido a la complejidad de la enfermedad. Pero las investigaciones sugieren que los afectados pueden tener una respuesta inmunitaria anormal y diferentes marcadores químicos en su membrana mucosa (que recubre los senos y la cavidad nasal), en comparación con los que no desarrollan pólipos nasales. Estos marcadores químicos actúan como señales que indican al organismo qué es y cómo debe reaccionar. Esta es un área de estudio activa que necesita mucha investigación.
Diagnóstico
Los pólipos nasales deben ser diagnosticados por su médico, que utilizará un endoscopio nasal, que es un pequeño telescopio delgado con una cámara en el extremo, para ver el interior de su nariz. En algunos casos, el médico puede tomar una pequeña muestra, llamada biopsia, del crecimiento. La tomografía computarizada o la resonancia magnética de los senos paranasales también pueden mostrar hallazgos que sugieran la presencia de pólipos nasales.
Tratamiento
Medicación: El primer curso de tratamiento para los pólipos nasales es a menudo un aerosol de corticosteroides nasales prescrito por su médico. Para muchas personas, esto puede reducir o eliminar los pólipos nasales. También pueden utilizarse corticosteroides orales.
Para muchas personas con pólipos nasales, éstos vuelven a aparecer si la irritación, la alergia, la infección o la inflamación continúan. Los antihistamínicos y descongestionantes pueden ayudar con los síntomas de alergia que pueden conducir al desarrollo de pólipos nasales, pero estos medicamentos no tratan directamente los pólipos nasales en sí.
Cirugía: Si el pólipo nasal no se elimina o se reduce con la medicación, entonces puede ser necesaria la cirugía endoscópica para eliminar los pólipos. El cirujano extirpará el pólipo, que está impidiendo que el flujo de los fluidos nasales y de los senos paranasales drene y ventile adecuadamente los conductos nasales. Esta cirugía suele realizarse de forma ambulatoria.
Pronóstico y prevención
Después de la cirugía, es importante cuidar adecuadamente la zona nasal. Los pólipos nasales, si no se tratan correctamente, probablemente volverán a aparecer.
Las siguientes estrategias se utilizan para evitar que los pólipos nasales vuelvan a aparecer:
Continúe utilizando un spray de corticosteroides. Un spray de corticosteroides ayudará a reducir la inflamación después de la cirugía. Su médico podrá recetarle estos y otros tratamientos específicos adaptados a sus necesidades.
Utilice un humidificador. Cuando el aire de su entorno se vuelve seco, especialmente durante el invierno y en climas áridos, un humidificador le ayudará a humedecer sus conductos nasales. Esto mejora el flujo de la mucosidad en los senos paranasales, evitando la obstrucción y la inflamación que pueden provocar la reaparición de pólipos nasales.
Utilice un spray o enjuague nasal. Los aerosoles y enjuagues nasales ayudan a humedecer los conductos nasales y a prevenir la inflamación. El lavado de los senos paranasales y de las cavidades nasales con una solución salina estéril también es importante para una correcta curación.
Evite los irritantes nasales. El polvo, los residuos, el tabaquismo y los alérgenos comunes pueden causar inflamación en las fosas nasales y los senos paranasales. Evite los irritantes nasales conocidos lo mejor que pueda.
Controlar las alergias y el asma. Siga el plan de tratamiento de su médico para controlar el asma y las alergias. Si los síntomas persisten, hable con su médico para cambiar su plan individualizado.
Revisado por Jean Kim, M.D., Ph.D., del Departamento de Otorrinolaringología-Cirugía de Cabeza y Cuello.