Nada es del todo «normal» cuando está embarazada, incluso las cosas cotidianas que parecen iguales, no lo son. Te sientes diferente, necesitas cosas diferentes, necesitas evitar cosas diferentes, etc. Cada día hace más calor en Alabama, y probablemente estés deseando ir a la playa. Sin embargo, si estás embarazada, hay consideraciones importantes que debes tener en cuenta antes de ir a la arena.
Siempre que tengas cuidado y estés segura, no hay razón para que no te regales un día de playa.
Beneficios de un día de playa para embarazadas
Si no estás estresada ahora mismo, lo más probable es que lo estés en algún momento. ¡La planificación de un bebé es mucho para manejar! Tomarse un tiempo para sentarse en la arena y escuchar las olas rompiendo es una gran manera de recargar. Tanto tu cuerpo como tu mente están pasando por muchas cosas; asegúrate de que te tomas tiempo para relajarte.
La playa es un lugar estupendo para ponerse al día con los amigos o los familiares, y un buen sitio para hacer ejercicios de bajo impacto. Da un largo paseo (preferiblemente con alguien) y deja que tus problemas desaparezcan. Lleva un libro que hayas querido leer, o escucha música o un podcast. Es el momento perfecto para disfrutar de algunas aficiones olvidadas. Tómate un tiempo para ti.
Lo que debes llevar
Debes evitar ir a la playa solo. Tu cuerpo está experimentando muchos cambios, y algunos de esos cambios significan que eres más propenso a sobrecalentarte o a sentirte mareado. Lleva a un amigo o a tu pareja, si es posible. Tanto si llevas a alguien como si no, siempre debes saber dónde se encuentra el centro médico más cercano.
¡Asegúrese de llevar ropa holgada y cómoda que sea transpirable! Su temperatura corporal es más alta de lo normal cuando está embarazada, por lo que sentirá más calor y sudará más fácilmente. También debes llevar mucha protección solar y sombra para sentarte, como un sombrero ancho o una sombrilla de playa. Este es un buen consejo para todos, pero es especialmente importante para ti. Tu piel es mucho más sensible debido a que la sangre (¡que hay de sobra!) está más cerca de la superficie de tu piel.
Cosas importantes a tener en cuenta
Tenga mucho cuidado en el agua. Si estás acostumbrada a saltar las olas y a nadar en la playa, tal vez quieras dejar eso para después de tener a tu bebé. Lo más probable es que no estés tan coordinada en ese momento. Una pequeña ola podría derribarte fácilmente.
Tienes que beber mucha agua. Es importante estar extra hidratada durante todo el embarazo, y eso vale doblemente para sentarse al sol en un día caluroso. La deshidratación es uno de los riesgos más comunes del embarazo, así que asegúrate de que tú y tu bebé bebéis mucha agua. Asegúrate también de llevar muchos tentempiés saludables.
¡Toma descansos cuando los necesites! Un viaje a la playa cerca de casa (o por lo menos cerca de Airbnb) es siempre lo mejor. Debes hacer pausas a lo largo del día para descansar en un espacio con sombra o con aire acondicionado y refrescarte.
Con estos elementos esenciales, y teniendo en cuenta estas cosas, ¡nada debería impedirte tener el día de playa que has estado deseando! Para obtener más consejos sobre el embarazo, visita nuestra página del blog de noticias &.