A menudo se piensa que el verano es la temporada de las garrapatas, pero esto es sólo un mito sobre estos chupasangres. Las garrapatas no mueren durante el invierno, ni dejan de buscar un huésped. Están a la caza en cualquier momento en que la temperatura supere los cero grados.
Por suerte para nosotros, los pequeños vampiros de la naturaleza no pueden convertirse en murciélagos, no necesitan una bala de plata para matar ni tienen la capacidad de chupar toda nuestra sangre en cuestión de segundos. Pero pueden dejar tras de sí enfermedades que, si no se tratan, pueden afectarnos para el resto de nuestras vidas, concretamente la enfermedad de Lyme.
Según la Dra. Ameera Nauman, pediatra del Centro de Salud OSF HealthCare Saint Anthony, todavía hay mucha confusión en torno a estos pequeños arácnidos.
- Mito: Una vez que te pican, estás infectado.
- Mito: Hay que quitar una garrapata con una fuente de calor o un producto químico.
- Mito: las garrapatas sólo transmiten la enfermedad de Lyme.
- Mito: Aléjate del bosque y estarás bien.
- Mito: Las garrapatas escarban bajo la piel.
- Mito: Si está infectado, tendrá una erupción o una diana alrededor de la picadura.
Mito: Una vez que te pican, estás infectado.
Hecho: No todas las garrapatas son portadoras de enfermedades, y las enfermedades que transmiten las garrapatas no se propagan por el mero hecho de ser picadas. Se calcula que, en las zonas de alto riesgo, sólo el 2% de las picaduras de garrapata de ciervo provocan la enfermedad de Lyme. Y son las toxinas de la saliva de la garrapata las que causan la enfermedad. Para transmitir una enfermedad, una garrapata necesita estar adherida entre tres y 96 horas, dependiendo de la garrapata y de la enfermedad que transmitan.
Mito: Hay que quitar una garrapata con una fuente de calor o un producto químico.
Hecho: No. Este mito es una idea de remedio casero para hacer que la garrapata «se eche atrás». Todo lo que necesita para quitar una garrapata es un par de pinzas, agarrando lo más cerca posible de la piel y tirando lentamente de la garrapata sin retorcerla. El uso de una fuente de calor no sólo puede ser peligroso, sino que puede hacer que la saliva infectada se introduzca en la picadura, aumentando las posibilidades de infección. Después de retirar la garrapata, lave el lugar de la picadura con agua y jabón y vigile el lugar en busca de síntomas.
Mito: las garrapatas sólo transmiten la enfermedad de Lyme.
Hecho: Mientras que la enfermedad de Lyme es la más común y bien conocida enfermedad transmitida por garrapatas, las siguientes enfermedades transmitidas por garrapatas también se han reportado en el Medio Oeste:
- Anaplasmosis (Alto Medio Oeste)
- Babesiosis (Noreste y Alto Medio Oeste)
- Borrelia Mayonii
- Borrelia Miyamotoi Enfermedad
- Virus del Borbón
- Virus del Corazón
- Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas
- Tularemia
Si viaja, visite el sitio web de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y conozca otras enfermedades transmitidas por garrapatas y las zonas afectadas.
Mito: Aléjate del bosque y estarás bien.
Hecho: Las garrapatas no caen de los árboles. Viven en el suelo y migran hasta un huésped antes de picar. Normalmente, una garrapata viaja largas distancias montada en un huésped como un ratón, por lo que puede encontrar garrapatas en su jardín o caminando por cualquier hierba alta. Sin embargo, es más probable encontrar garrapatas en los campos o zonas boscosas con follaje alto. Si va a estar en zonas de alto riesgo, intente hacer una barrera con la ropa para mantener a las garrapatas alejadas de la piel: meta las perneras de los pantalones en los calcetines y la camisa en el cinturón.
Mito: Las garrapatas escarban bajo la piel.
Hecho: Una garrapata se alimentará hasta que se llene y entonces se caerá. Esto suele tardar entre tres y seis días. La zona que rodea la picadura puede empezar a hincharse alrededor de la cabeza de la garrapata, pero la garrapata no se adentra en la piel.
Mito: Si está infectado, tendrá una erupción o una diana alrededor de la picadura.
Hecho: No todas las personas experimentan signos reveladores de una enfermedad transmitida. Según los CDC, sólo entre el 70 y el 80 por ciento de las personas infectadas por la enfermedad de Lyme presentan este tipo de sarpullido. Podrías estar infectado aunque tu piel no lo muestre. Si sospecha que se trata de una enfermedad transmitida por garrapatas, hable con su médico de cabecera y explíquele cuándo le ha picado y qué síntomas ha experimentado. Existen diferentes pruebas de laboratorio diseñadas para identificar las enfermedades transmitidas por garrapatas.
Para saber más sobre las garrapatas y las enfermedades que transmiten, visite la biblioteca de OSF Health.