Las muelas del juicio, también denominadas «terceros molares», son tan importantes como los demás dientes, pero son más propensas a sufrir problemas durante su erupción (atravesando el tejido de la encía). Dado que las muelas del juicio son las últimas en salir -por lo general, entre los 17 y los 21 años-, a menudo queda poco espacio en la boca.
Como resultado, pueden salir de lado, sólo parcialmente, o quedar atrapadas (impactadas), lo que provoca dolor, infección e inflamación de las encías y la cara. Cuando se presenta cualquiera de estas condiciones, su dentista puede determinar que la extracción es necesaria.
Extracción de las muelas del juicio
La extracción es una cirugía oral bastante común, sin embargo el procedimiento es complicado si las muelas del juicio aún no han erupcionado. Algunos dentistas generales tienen la habilidad necesaria para eliminar las muelas del juicio impactadas o no erupcionadas, aunque la mayoría de las personas requieren los servicios de un cirujano oral. De hecho, muchos pacientes prefieren estar fuertemente sedados para el procedimiento. Por lo tanto, los dentistas deben tener el equipo y la habilidad necesaria para sedar o proporcionar anestesia general a los pacientes.
Los riesgos asociados a la extracción incluyen (pero no se limitan a):
- Dolor
- Sangrado
- Hinchazón
- Apertura persistente de los senos paranasales
- Entumecimiento del labio inferior
Los dentistas son muy conscientes de las desventajas de conservar las muelas del juicio, algunas de las cuales incluyen el desplazamiento potencial de los dientes circundantes, el dolor de mandíbula y las interrupciones con la funcionalidad normal del seno. Sin embargo, la decisión de la extracción es de su dentista.
Recuperación de la extracción
La recuperación dura aproximadamente entre cinco y siete días, y la zona de las encías se cura por completo en unas tres o cuatro semanas. Si la mandíbula se daña durante la extracción, la recuperación completa puede tardar hasta seis meses.
Una vez que se ha sometido al procedimiento de extracción quirúrgica, hay que seguir varios pasos para garantizar una curación y recuperación adecuadas del procedimiento.
Durante las primeras 24 horas después de la extracción, puede esperar algo de sangrado. Para controlar la hemorragia, se puede colocar una gasa húmeda y limpia sobre el lugar de la extracción. La presión aplicada durante 45 minutos debería detener la hemorragia.
Una bolsita de té también es una alternativa eficaz a la gasa para evitar la hemorragia, con el beneficio añadido del ácido tánico, que ayuda a la formación de coágulos. Si se produce una hemorragia intensa durante un tiempo prolongado, póngase en contacto con su cirujano oral o dentista.
Se pueden utilizar puntos de sutura durante la intervención si la muela del juicio está impactada y debe extraerse de la superficie de la línea de las encías. Si los puntos de sutura no se disuelven por sí solos, tendrán que ser retirados después de la operación. Su cirujano dental le dirá si tiene que volver a la consulta para que se los quiten.
También es de esperar que se produzca una hinchazón facial después de la extracción. Para aliviar la hinchazón, envuelva hielo en un paño y aplíquelo en la zona facial hinchada. El hielo debe aplicarse durante 10 minutos y retirarse durante 20 minutos, y luego repetirse. Este ciclo puede repetirse tantas veces como sea necesario durante las primeras 24 horas después de la extracción.
Para el dolor y las molestias, pueden utilizarse medicamentos de venta libre como el paracetamol o el ibuprofeno. El cirujano dental puede recetar analgésicos con receta, si es necesario. Los antibióticos también pueden ser prescritos antes del procedimiento para eliminar cualquier infección del tejido que rodea las muelas del juicio. Después de la extracción, es importante seguir tomando la medicación para prevenir cualquier infección adicional.
Cuidados posteriores
Después de la extracción, también es necesario mantener una higiene bucal adecuada, así como seguir estas recomendaciones:
- No se enjuague la boca durante las primeras 24 horas inmediatamente posteriores a una extracción dental.
- Siga una dieta blanda o líquida (leche, helado, puré de patatas, pudín) el día de y el día después de una extracción dental, progresando gradualmente a comer otros alimentos fáciles de masticar. Mastique con los dientes que están lejos del lugar de la extracción.
- Cepille y use el hilo dental en los demás dientes como de costumbre, pero evite los dientes y la encía próximos al alveolo de la extracción.
- Después de las primeras 24 horas, enjuague suavemente el alveolo con agua salada tibia (1/2 cucharadita de sal en una taza de agua) después de las comidas y antes de acostarse. Repita este proceso durante al menos cinco días después de la extracción.
¿Cuánto cuesta la extracción de las muelas del juicio?
El coste de la extracción de las muelas del juicio depende de varios factores, como:
- La experiencia del dentista.
- La ubicación del dentista.
- El tipo de seguro dental que tenga.
- La extensión del procedimiento.
La extracción de las muelas del juicio puede oscilar entre 140 y 400 dólares por muela. Este rango de costos no incluye los honorarios asociados con la sedación, los rayos X, las posibles necesidades de cirugía oral, o la proximidad de la muela del juicio a los dientes y los nervios circundantes. Los costes de extracción de las muelas del juicio impactadas son significativamente más altos que los de las muelas del juicio erupcionadas.
Dependiendo del tipo de seguro dental que tenga, las compañías de seguros pueden proporcionar un reembolso del 15 por ciento o hasta una absorción del 50 por ciento de los costes totales del procedimiento.
Pros &Contras de la extracción
La comunidad dental sabe más que nunca sobre las consecuencias de no extraer las muelas del juicio impactadas. Si no se extraen las muelas del juicio impactadas, puede ocurrir lo siguiente:
Desplazamiento de los dientes: Las muelas del juicio impactadas pueden desplazar los dientes circundantes, causando irregularidades en la mordida y dolor.
Pérdida de hueso y expansión de la mandíbula: Las muelas del juicio impactadas pueden desempeñar un papel en la pérdida de hueso y la expansión de la mandíbula.
Congestión: Las muelas del juicio pueden contribuir a la congestión de los senos paranasales y a los dolores de cabeza.
Quistes y tumores: Las muelas del juicio impactadas pueden ser un factor en el desarrollo de tumores o quistes que destruyen el hueso, incluyendo la formación de quistes en el tejido gingival circundante.
Irritación del tejido gingival: El tejido gingival que rodea a las muelas del juicio impactadas tiende a ser más susceptible a la irritación de las encías. Si las muelas del juicio no erupcionan completamente y quedan torcidas, puede resultar difícil limpiar adecuadamente las encías.
Bolsas periodontales, caries y pérdida ósea: La dificultad para limpiar las encías facilita que se alojen los restos, creando el escenario perfecto para las bacterias. Las bacterias resultantes pueden producir bolsas periodontales, crear caries y conducir a la pérdida de hueso.
Cambios en la ortodoncia y las prótesis dentales: Para los niños, las muelas del juicio pueden afectar negativamente a los resultados de la ortodoncia. En el caso de los ancianos, las muelas del juicio pueden socavar la funcionalidad de las prótesis dentales.
Alveolo seco
El alveolo seco está causado por la formación inadecuada o la pérdida prematura del coágulo sanguíneo en el lugar de la extracción; puede ser bastante doloroso y provoca un retraso en la recuperación.
Para prevenir el alveolo seco, evite fumar cigarrillos y utilizar pajitas durante el mayor tiempo posible después de la extracción. Dado que los altos niveles de estrógeno provocan una mayor incidencia de alveolos secos, se recomienda que las mujeres programen las extracciones hacia el final de su ciclo menstrual, cuando los niveles de estrógeno son más bajos, para reducir el riesgo asociado.
Los alveolos secos también pueden producirse debido a una dieta inadecuada tras la extracción. Deben evitarse alimentos como las palomitas de maíz, los frutos secos y la pasta durante al menos tres o cuatro días después de la extracción, ya que sus partículas pueden interferir en el proceso de coagulación. También deben evitarse los líquidos y alimentos calientes, ya que el calor puede hacer que el coágulo se desprenda.
Las ventajas de conservar las muelas del juicio
Las muelas del juicio también tienen ventajas. Por ejemplo, pueden servir de soporte para un puente dental o rellenar el espacio que deja un molar perdido. Además, algunos científicos creen que las muelas del juicio pueden servir como futura fuente de células madre para el desarrollo de nuevos dientes.
¿Extraer o no extraer?
Los dentistas determinaban anteriormente si debían extraer las muelas del juicio utilizando la única herramienta de diagnóstico que tenían a su disposición: un examen dental.
Los dentistas pueden utilizar una o más tecnologías dentales durante un examen dental para diagnosticar la necesidad de extraer una muela del juicio (como las radiografías panorámicas y digitales). Estas tecnologías pueden ayudar a determinar la conveniencia de la extracción y la mejor manera de abordar el procedimiento. También se utilizan para ayudar a identificar los riesgos adicionales que pueden influir en el enfoque del dentista para el procedimiento, como las características anatómicas del diente y las estructuras circundantes.
Los riesgos de complicación asociados a la extracción para las personas mayores de 35 años son mayores que los de los candidatos más jóvenes. Las personas mayores de 50 años que se enfrentan a una extracción tienen un mayor riesgo de complicaciones porque el hueso se fusiona con los dientes a medida que envejecemos. También existe el riesgo de entumecimiento en la zona de la extracción.
En definitiva, si se espera a extraer las muelas del juicio hasta que haya motivos de preocupación médica, aumenta el riesgo de todas las complicaciones. En la actualidad, los dentistas suelen recomendar la extracción de las muelas del juicio potencialmente problemáticas antes de los 18 años.