No, no están enfermas del mar. El color verdoso-azulado es causado por un tipo especial de fitoplancton conocido como Navicula ostrearia. El efecto ha sido estudiado por los científicos desde 1820, y encontré este documento de investigación de 1885 muy intrigante. El tinte verde es temporal y no cambia el sabor. Si la presencia de esta diatomea disminuye, la ostra también volverá a su color original en unas semanas. Las ostras verdes gozan de una reputación positiva y deseable en Francia, donde se cultivan especialmente en Marennes, pero pueden darse con la misma facilidad en la naturaleza sin ninguna interferencia humana. Las fotos de arriba son de ostras del estrecho de Rhode Island y de Long Island, respectivamente. Las ostras verdes también han aparecido tan al sur como Lynnhaven, Virginia.
También te estarás preguntando por el lado más oscuro de esta ecuación: ¿las ostras también comen cosas que pueden ser perjudiciales para nosotros? Es posible, pero todo depende de la ubicación. Los metales traza, los productos químicos y las bacterias pueden llegar a las ostras si están presentes en el lugar en el que viven, y por eso ya no se consumen ostras del puerto de Nueva York. (Por cierto: he encontrado esta entrada del blog de Chris Len para Deep Sea News que merece la pena leer). En general, sin embargo, esto no debería ser una preocupación. Las ostras que se encuentran en los restaurantes y mercados de marisco actuales son perfectamente seguras de consumir. Se recogen adecuadamente en aguas altamente reguladas que contienen niveles mínimos de contaminantes. Tiendo a pensar que las personas son más peligrosas para la salud que las propias ostras, y por eso siempre hay que comprar las ostras en fuentes de confianza.