No es científicamente posible asignar eventos meteorológicos individuales al cambio climático actual, sin embargo, se puede demostrar estadísticamente que el calentamiento global aumentará la probabilidad de eventos meteorológicos extremos.
Las consecuencias directas del cambio climático provocado por el hombre incluyen:
- el aumento de las temperaturas máximas
- el aumento de las temperaturas mínimas
- el aumento del nivel del mar
- el aumento de las temperaturas de los océanos
- un aumento de las precipitaciones intensas (lluvias torrenciales y granizo)
- disminución de los glaciares
- deshielo del permafrost
Las consecuencias indirectas del cambio climático, que nos afectan directamente a los humanos y a nuestro entorno, incluyen:
- un aumento del hambre y de las crisis de agua, especialmente en los países en desarrollo
- riesgos para la salud por el aumento de la temperatura del aire y las olas de calor
- implicaciones económicas para hacer frente a los daños secundarios relacionados con el cambio climático
- aumento de la propagación de plagas y patógenos
- pérdida de biodiversidad debido a la limitación de la velocidad de adaptación de la flora y la fauna
- la acidificación de los océanos debido al aumento de las concentraciones de HCO3 en el agua como consecuencia del aumento de las concentraciones de CO₂
- la necesidad de adaptación en todos los ámbitos (e.p. ej., agricultura, silvicultura, energía, infraestructuras, turismo, etc.)
. Como el clima mundial es un sistema muy interconectado en el que influyen muchos factores diferentes, las consecuencias suelen tener efectos de retroalimentación positivos o negativos. Esto se refiere a los desarrollos que se auto-mejoran debido a la ocurrencia de ciertas condiciones.
Un ejemplo común es la retroalimentación hielo-albedo, que se refiere al derretimiento de los casquetes polares. Según esto, las extensas superficies de hielo tienen un efecto de enfriamiento en el clima global, ya que se refleja una alta proporción de radiación. Sin embargo, como consecuencia del aumento global de la temperatura media, estas superficies de hielo comienzan a derretirse, las superficies de hielo se encogen y la cantidad de radiación reflejada se reduce. Al mismo tiempo, la superficie de tierra u océano que tiene un albedo significativamente menor aumentará, reflejando menos radiación e intensificando así la causa real del derretimiento de los glaciares.
Además, los científicos pueden calcular los llamados puntos de inflexión de los subsistemas individuales del clima global. Cuanto mayor sea el aumento global de la temperatura, más se verá afectado el sistema climático, de modo que en un determinado momento, a pesar de los importantes esfuerzos, ya no será posible invertir el proceso. Sin embargo, en la actualidad no está claro dónde se encuentran exactamente estos puntos de inflexión y sólo pueden calcularse con un gran grado de incertidumbre. Estos puntos de inflexión se esperan para el deshielo de los casquetes polares y para la estabilidad de importantes corrientes oceánicas.
Puede encontrar más información interesante sobre el tema del cambio climático y la protección del clima en nuestro folleto sobre el clima