¿Ha sentido alguna vez como si su corazón «se saltara un latido»? La mayoría de las personas experimentan esta sensación en un momento u otro.
En realidad, su corazón no se salta un latido. En cambio, es probable que haya tenido una contracción prematura.
Las contracciones prematuras ocasionales son normales, y son comunes en niños y adolescentes. Por lo general, no se encuentra ninguna causa y muchas desaparecen por sí solas.
Tipos de contracciones prematuras
Una contracción prematura puede originarse en las cámaras superiores (aurículas) o inferiores (ventrículos) del corazón. Con este latido «extra», una pausa suele provocar que el siguiente latido normal sea más fuerte.
Los latidos prematuros que se inician en las cámaras superiores del corazón son contracciones auriculares prematuras, o CAP. Los que se inician en las cámaras inferiores son contracciones ventriculares prematuras, o PVC.
Pruebas y tratamiento
Con frecuencia, las contracciones prematuras pueden estar causadas por una enfermedad o lesión del corazón. Si su médico sospecha esa posibilidad, puede sugerirle la realización de pruebas para controlar su función cardíaca.
Si se descubre una causa de las contracciones prematuras, su médico puede recomendarle un plan de tratamiento.