- Entender el impacto de un tratamiento líder para la artritis
- ¿Con qué frecuencia puedo recibir una inyección de cortisona?
- ¿Puedo tomar comprimidos de corticosteroides además de las inyecciones?
- Efectos secundarios de las inyecciones de cortisona
- Sumando los riesgos y los beneficios de las inyecciones de cortisona
Entender el impacto de un tratamiento líder para la artritis
Si experimenta dolor de rodilla a causa de la artritis, su médico puede recetarle una serie de opciones: fisioterapia, medicamentos, inyecciones e incluso cirugía. Todo depende de los detalles de su diagnóstico específico.
Debido a que no existe una cura conocida para ninguna forma de artritis (incluida la osteoartritis), los médicos consideran que muchos pacientes son capaces de controlar sus síntomas -aunque sólo sea temporalmente- con inyecciones de cortisona. Estas inyecciones, que son el tratamiento más habitual para aliviar el dolor de la artritis, contienen corticoesteroides, un fármaco que imita las hormonas que se producen de forma natural en el organismo para reducir la inflamación. Al inyectar un corticosteroide en las articulaciones artríticas de la rodilla, los médicos pueden reducir el dolor de la rodilla y aumentar la movilidad de los pacientes durante semanas, a veces meses.
¿Con qué frecuencia puedo recibir una inyección de cortisona?
En general, debido a los riesgos asociados a las inyecciones de cortisona, los médicos recomiendan que los pacientes no reciban inyecciones con más frecuencia que cada doce semanas, no más de tres o cuatro veces al año en una sola articulación, y no más de seis al año para todo el cuerpo.
Dicho esto, cada persona es diferente, y el número de inyecciones de cortisona que le recomiende su médico variará, dependiendo de factores como su estado de salud general y su tolerancia al dolor.
¿Puedo tomar comprimidos de corticosteroides además de las inyecciones?
Tomar comprimidos de corticosteroides además de las inyecciones aumenta considerablemente el riesgo de sufrir efectos secundarios adversos. Además, tomar un corticosteroide por vía oral en lugar de inyectar cortisona en el lugar de la articulación enferma reduce el alivio del dolor que podría experimentar. La píldora es un tratamiento de banda ancha para todo el cuerpo, que no se dirige a la zona específica con dolor. También hay más efectos secundarios y riesgos potenciales para el uso de esteroides orales.
Efectos secundarios de las inyecciones de cortisona
Las inyecciones de cortisona, como muchos tratamientos, tienen sus efectos secundarios a pesar de los grandes beneficios. Estos riesgos para la salud incluyen:
- Debilitamiento y supresión del sistema inmunitario
- Debilitamiento o rotura de tendones
- Agotamiento y debilitamiento de la piel, tejidos blandos y huesos
- Muerte ósea por falta de circulación sanguínea
- Dolor e inflamación articulares temporales
- Deterioro del cartílago
- Infección articular
- Daños nerviosos
Los pacientes se exponen a un mayor riesgo de contraer estos efectos secundarios si reciben tratamientos con cortisona con más frecuencia de la recomendada por su médico. Además, muchos médicos dudan a la hora de administrar inyecciones de cortisona a pacientes diabéticos, debido a la capacidad del fármaco para elevar los niveles de azúcar en sangre.
Sumando los riesgos y los beneficios de las inyecciones de cortisona
Aunque las inyecciones de cortisona proporcionan un alivio temporal del dolor de la artritis, es importante recordar que no restauran el cartílago perdido ni ralentizan la progresión de la osteoartritis. Para obtener más información sobre las inyecciones de cortisona, póngase en contacto con los Centros de Alivio de la Artritis hoy mismo para programar una consulta gratuita.