Antecedentes
El dolor neuropático es el que surge de los nervios dañados. Su naturaleza es diferente a la del dolor que surge de un tejido dañado, como un corte, aunque ese tipo de dolor también se transmite por los nervios. Los fármacos que se utilizan habitualmente para tratar el dolor, como el paracetamol, el ibuprofeno o la morfina, no son muy buenos para tratar el dolor neuropático. Sin embargo, otros fármacos, como la gabapentina, que también se utilizan para prevenir o tratar la epilepsia (ataques), sí parecen tener cierto beneficio en el tratamiento del dolor neuropático. También existe un gran interés por utilizar fármacos antidepresivos para tratar el dolor neuropático. Esto no implica que la persona con dolor neuropático esté deprimida, sino simplemente que estos fármacos pueden tener beneficios en el dolor neuropático. Sin embargo, aunque algunos médicos prescriben antidepresivos en personas con dolor neuropático, sus beneficios no han sido confirmados en grandes ensayos clínicos.
Aquí revisamos los ensayos clínicos de un fármaco antidepresivo, la venlafaxina, para ver si existen pruebas sólidas de que es eficaz en el tratamiento del dolor neuropático.
Características de los estudios
En las búsquedas detalladas de la literatura médica, se encontraron seis ensayos adecuados para su inclusión en nuestro análisis, que en conjunto incluyeron a 460 adultos.
Resultados clave y calidad de la evidencia
Los seis ensayos se realizaron de forma estadísticamente aprobada (aleatorizados y a doble ciego); sin embargo, todos tenían limitaciones que podrían llevar a una sobreestimación de la eficacia en el tratamiento de este tipo de dolor. Cuatro eran de tamaño muy pequeño y cinco eran de corta duración, lo que puede sesgar los resultados de los ensayos de dolor crónico. Aunque no fue posible combinar los resultados de todos los ensayos para llegar a una conclusión general, todos ellos mostraron individualmente algún beneficio, aunque moderado, de la venlafaxina en el tratamiento del dolor neuropático. Por lo general, este beneficio se logró con dosis de 75 a 225 mg por día. Los efectos secundarios conocidos de la venlafaxina, incluyendo somnolencia, mareos y problemas gastrointestinales leves, fueron notificados por algunos estudios, pero no fueron particularmente problemáticos.
En general, actualmente no hay una cantidad adecuada de información disponible para justificar cualquier cambio en la práctica actual de prescripción y no podemos recomendar la venlafaxina como tratamiento de primera línea para el dolor neuropático. Sin embargo, es un fármaco razonablemente bien tolerado y puede ser beneficioso para las personas que no toleran otros antidepresivos o anticonvulsivos que se prescriben más ampliamente a las personas con dolor neuropático. Es posible que ensayos clínicos más amplios proporcionen pruebas más sólidas de la eficacia de la venlafaxina en el tratamiento del dolor neuropático.