Hacer caramelo casero puede parecer desalentador. Pero no lo es en absoluto cuando sigues estos consejos (y asegúrate de mirar las fotos paso a paso que aparecen a continuación).
¿Qué es el caramelo?
Hacer caramelo puede parecer intimidante, ¡pero realmente no lo es! Se empieza por combinar el azúcar, la sal y el agua en una cacerola pequeña y se lleva a ebullición para que el azúcar se disuelva. Esta es la parte práctica: Debes batir de vez en cuando hasta que estés seguro de que el azúcar se ha disuelto por completo. A continuación, suba el fuego y deje que la mezcla de azúcar y agua se cocine, lo que le dará un bonito color dorado.
¿Cómo sé cuándo está listo el caramelo para apagar el fuego?
Esta es la forma más fácil de recordar siempre cuándo está hecho: Quieres que la mezcla tenga un color profundamente dorado que se asemeje a un centavo de cobre. Una vez que lo veas, ¡apaga el fuego!
¿Cómo se vuelve cremoso?
Después de que la mezcla de azúcar y agua esté cocida, se añade la mantequilla y la nata doble, que es lo que hace que sea el caramelo que conoces y amas. Cuidado. La mezcla de azúcar estará MUY caliente y esta mezcla siempre burbujea, así que ten cuidado.
¿Necesito un termómetro?
Bien, esta es la cruda verdad: No-he ojeado el caramelo muchas veces-pero reducirá tu estrés. El caramelo pasa de tener una textura agradable y sedosa a… bueno… caramelo (!) en cuestión de un minuto o dos, así que es súper importante controlar la temperatura. Si no controlas la temperatura con un termómetro, tu otra opción es hacer la prueba del color.
¿Cuánto dura el caramelo casero?
Puedes guardarlo en un tarro hasta 2 semanas en tu nevera.
¿Con qué puedo usar la salsa de caramelo?
Um, con todo. O, TBH, nos gusta comerla directamente del frasco con una cuchara.